Jueves, 24 de diciembre de 2009
Después de años y años, este día llega con ganas, es el comienzo de la Navidad, el día en el que toda tu familia se reune para cantar unos cuantos villancicos.
Lo primero de todo es pensar en lo que me voy a poner, pude tirarme toda la mañana rompiéndome la cabeza pensando con lo que iba a sorprender. Sin embargo, te das cuenta de que, no tienes porqué ponerte demasiado elegante, ni mucho menos, sofisticada, en realidad nadie me iba a ver, y podía ir, informal, sencilla, pero resultona, asi que algo tuve muy claro desde el primer momento, no podían faltar en una fecha tan importante mis zancos grises. Decidí prescindir de faldas y vestidos, asi que cogí los pantalones más nuevos de mi armario y me coloqué de lo mas sencillo y a su vez resultón.

Después de ir de casa en casa, felicitando las navidades a todos mis tíos, con los que, por desgracia, no celebro este año la navidad, tuve que recorrerme buena parte de Salamanca subida en esos 15 centímetros, acabando demasiado harta de ellos, aunque he de decir, y no es por dármelas ni mucho menos, pero todo el mundo por la calle, se quedaba asombrada con mis zapatos, ya que aquí en Salamanca, no es muy normal verlos de ese estilo.

Después de más de dos horas fuera de casa, a eso de las 21.30h, por fin, llegué a casa de mis abuelos, donde puede descansar unos momentos, y más tarde, sentarnos todos a la mesa, para celebrar la noche. Una noche, que se hizo larga, pero amena.

Después de comentaros mis dos días de Navidad, os dejo las fotos de la cena de Navidad con todos mis amigos. Donde se vieron muchas faldas, y muchos pantalones también. Aquí, como podéis ver, estamos mi amiga Esther y yo, de las pocas que llevábamos falda/vestido.

De nuevo, con mis zancos grises, los cuales tengo que amortizar, porque mi madre afirmaba que no me los iba a poner, y como ella misma puede ver, eso no es cierto. Y el outfit en general, que ese mismo día estrene, ya que antes no había tenido ocasión para hacerlo.

Y aquí os dejo, a las que para mi gusto iban mejor. Esther y Tuky, cada una con su estilo, sencillas, pero super monas. La falda rosita palo de Tuky me parece de lo más coqueto,
y el vestido de Esther, super elegante. Asi que bravo para las dos, ibais guapisimas chicas, ya os lo dije.

Por lo demás, empezó siendo una noche aburrida, y acabó en unos muy buenos momentos, asique al fin y al cabo, no estuvo tan mal.
Ya sabéis chicos, no gastéis mucho, que estamos en época de regalos, y ya sabéis que luego dejamos la tarjeta de crédito tiritando.
1 comentario:
Oh sí, Feliz Navidad cariño mío.
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